Los errores del imperativo

imperativo

Uno de los errores más comunes en español es el imperativo, ese modo que denota principalmente ruego, mandato o exhortación. No lo usamos como es debido, incluso le añadimos consonantes o cambiamos su forma como nos conviene. A continuación, haremos un breve repaso por los casos imperativos más disolutos entre los hispanohablantes. Seguro que todos ellos te suenan porque los has empleado alguna vez. ¡Empezamos con los usos erróneos del imperativo!

 

DOS ERORRES MUY EXTENDIDOS

La práctica errónea más extendida consiste en reemplazar la segunda persona del plural del imperativo (comed, estudiad, leed) por su forma en infinitivo. Por ejemplo:

❌ ¡Comer y luego habláis!
✔️ ¡Comed y luego habláis!

❌ Estudiar en esa mesa de ahí, chicos.
✔️ Estudiad en esa mesa de ahí, chicos.

 

Como veis, la d es la marca del imperativo.

De cualquier manera, usamos mal también el imperativo con el pronombre enclítico pospuesto al verbo. Os recuerdo que los pronombres enclíticos son: me, te, lo, la, etc. Por ejemplo: dibújala, míralo o cómprate. Bien, estos verbos con el pronombre enclítico pospuesto los usamos muchas veces como imperativos añadiendo una r:

❌ Dibujarla
✔️ Dibujadla

❌ Mirarlo
✔️ Miradlo

❌Comprarme
✔️ Compradme

Como veis, la d intervocálica se suprime, y esto es erróneo, porque, como decía antes, el imperativo requiere una -d, esa es la marca de la casa. EXCEPTO con un verbo. ¡Cómo nos gustan las excepciones!

 

VERBO IR

¿Qué ocurre con este verbo? La Academia recomienda la forma idos, claro, tiene la d imperativa, pero desde el año 2017 también acepta la forma iros, ya que en el español culto de la lengua escrita cada vez está más extendido.

✔️ Iros, que ya va a empezar la película.
✔️ Idos, que ya va a empezar la película.

Por lo tanto, esta forma idos es una excepción en el sistema verbal español, pues es el único caso en que se conserva la terminación -d antes del pronombre os. Por ejemplo, así se vería en otros verbos: leed – leeos, bebed – bebeos, morid – moríos.

Pese a que el verbo ir es una excepción, no por ello se libra de las argucias de Titivillus, ya que al imperativo se le suele añadir de manera errónea una ese en la segunda persona del singular por influencia del catalán. Y estas formas vulgares también las vemos en irse y en otros verbos.

❌ Ves y cógeme el libro de la estantería.
✔️ Ve y cógeme el libro de la estantería.

❌ Juan, ves a comprar esa novela que te gusta.
✔️ Juan, ve a comprar esa novela que te gusta.

❌ Si me queréis bien, irse.
✔️ Si me queréis bien, iros.

 

Además, hay que tener cuidado con no confundir el indicativo con el imperativo del verbo en cuestión. Por ejemplo:

❌  ¿Tenéis que idos mañana?
✔️ ¿Tenéis que iros mañana?

 

ROTACISMO

Un fenómeno curioso que ocurre en la lengua a este respecto se llama rotacismo. Para no extenderme mucho, diré que según la Gramática de la Real Academia Española el rotacismo en el imperativo está presente en la forma iros, donde la «d» de idos cambia a «r» (en cambio, la «r» de callaros sería una adición a callaos). Como he comentado anteriormente, «el DPD censuraba el uso de iros en lugar de idos, pero la NGLE no lo tacha de incorrecto y aclara que predomina en la lengua oral de España». El rotacismo cada vez nos acecha más de cerca, puede ser la nueva pandemia que está por llegar, amigos. De hecho, lo podemos ver en cualquier verbo. Por ejemplo:

❌ Bajaros del coche ahora mismo.
❌ Cogeros el abrigo que hace frío.

Lo dicho, estos ejemplos solo serían correctos con el verbo ir (iros)

✔️ Iros en el coche de mi prima.
✔️ Idos en el coche de mi prima.

 

VERBO CALLAR

Una vez que habéis llegado hasta aquí, os propongo un reto. ¿Cuál de estas opciones es la correcta?

→ Callaros, por favor.
→ Callarse, por favor.

Exacto, ninguna de las dos es correcta pese a que ambas son imperativas y se construyen con el infinitivo callar seguido de un pronombre. La sustitución del imperativo por el infinitivo no está permitida en este tipo de frases. Por lo tanto, tendría que haber sido: Callaos, por favor.

 

CASOS CURIOSOS

Para que veáis que el imperativo es un caso excepcional en sí mismo, tened presente que no puede usarse para órdenes negativas, y ha de emplearse el subjuntivo.

❌  Niños, no chillad no clase.
✔️  Niños, no chilléis en clase.

 

Por otro lado, solo hay dos casos en que puede utilizarse el infinitivo con función de imperativo:

  • Cuando va precedido de la preposición a: ¡a bailar! ¡a jugar!, ¡a comer! Esto es así porque se supone la omisión de un verbo auxiliar en imperativo: venid a jugar o venid a comer.
  • Cuando se trata de órdenes impersonalizadas sin locutor fijo: girar a la derecha, no fumar, no tocar. Nuestra amiga Siri seguro que sabe esto muy bien.

 

Por último, hablemos del verbo satisfacer. Este verbo suele usarse mal en su forma imperativa. De hecho, es complicado encontrar a alguien que sepa conjugar el futuro de subjuntivo del verbo satisfacer. Más difícil aún que un conductor use los intermitentes de manera correcta o haga la declaración de la renta sin desesperarse. Como dato curioso, os diré que este verbo se conjuga como el verbo hacer (que antiguamente era facer). Pensad en la conjugación, solo tenéis que poner satis y luego conjugarla con facer. Aunque la única excepción la encontramos en la segunda persona del singular del imperativo, que se puede decir de dos maneras: satisfaz y satisface.

 

¡Y hasta aquí el grupo de imperativos de hoy! Ya no trataréis a un imperativo de la misma manera y seguro que veréis errores por todas partes. ¡Ánimo!

 


Fuente:

-Florentino Paredes, Salvador Álvaro y Luna Paredes (2019), Las 100 dudas más frecuentes del español, Barcelona: Espasa.

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